¿Qué significa?

 

Es algo así como “reconstruyendo a mamá” y se refiere al grupo de cirugías que están diseñadas para devolver a la mujer la figura que tenía antes de sus embarazos. Por lo general incluye una abodminoplastía con un poco de liposucción, acompañado de algún procedimiento en el busto que puede ser aumento, reducción o levantamiento con implantes.

 

¿Quiénes son candidatas?

 

Aquellas mujeres que ya tienen una paridad satisfecha (es decir, que ya no desean embarazarse) y que quieren mejorar su figura incluyendo el abdomen y el área del busto.

 

¿Cómo se realiza?

 

En un solo procedimiento quirúrgico podemos llevar a cabo varias intervenciones. Siempre y cuando la salud de la paciente lo permita.

 

¿Qué tipo de anestesia se utiliza?

 

Generalmente para todo el procedimiento podremos utilizar un bloqueo epidural (anestesia en la espalda). 

 

¿Cuánto dura el procedimiento?

 

Realizando las dos operaciones (abdomen y busto) generalmente el tiempo de la intervención va de 5 a 6 horas, sin embargo no se utiliza anestesia general.

 

¿Cuál es el tiempo de recuperación?

 

Normalmente será de aproximadamente dos semanas, sin embargo hay variaciones en la recuperación dependiendo de cada paciente en particular.

 

¿Qué cicatrices habrá?

 

Las mismas cicatrices que nos deja una abdominoplastía (cicatriz en la porción inferior del abdomen), y las cicatrices del procedimiento mamario que elijamos.

 

¿En cuánto tiempo se verá el resultado?

 

Como en la mayoría de los procedimientos de Cirugía Plástica, podremos ver resultados inmediatamente después de la operación, sin embargo el resultado final no se verá hasta unos dos meses después, una vez que haya terminado el proceso inflamatorio.

 

¿Es posible embarazarse después de un Mommy Makeover?

 

Si la paciente no tiene un método definitivo para evitar un embarazo (como salpingoclasia), siempre existirá la posibilidad de un embarazo, sin embargo, este podrá llevarse a cabo con toda normalidad, sin que se vea en peligro por el hecho de tener una cirugía abdominal.  Desafortunadamente, gran parte de los resultados de la cirugía se perderán al término del embarazo, siendo necesario en algunas ocasiones algún retoque o incluso una nueva intervención.